lunes, 14 de septiembre de 2009

Soy diferente, como todo el mundo

Bueno, pues después de una larga ausencia, aquí estoy para retomar un poco mi actividad en el blog :)

Quiero hablaros de la, al menos para mí, absurda tendencia que se está observando últimamente de poner de moda lo raro. Cuando digo raro quiero decir oscuro, extraño, siniestro.

Yo, de adolescente, fui la típica chica siniestra, adoradora de grupos oscuros y de películas como Jóvenes Ocultos. Ahora, mucho tiempo después, mis gustos siguen yendo por el mismo camino, con la única diferencia de que ya no le doy tanta importancia al aspecto estético (visto como quiero y ya está, sin considerar una norma inquebrantable ir de negro todos los días o con las uñas pintadas del mismo color), ni soy tan radical. Puedo reconocer que no toda la música que me gusta es siniestra sin sentir que estoy traicionando al Gran Dios Oscuro o algo así. En definitiva, siempre he sido y sigo siendo bastante, digamos, gótica. Y lo digo sólo para que os hagáis una idea: ahora mismo ya no me gusta catalogarme como nada. Soy yo, con mis muchos matices, y ya está.

Cuando iba al instituto todo el mundo me miraba raro. Y con 15 ó 16 años fui la única en mi clase que llevaba tatuajes, piercings en lugares poco comunes y vestía botas New Rock.

Ahora, sin embargo, todo eso está de moda. Está de moda ser oscurito, ir de depresivo por la vida. Ser emo, que es un término que ha salido de la nada y que no sé qué significa, pero que se me antoja algo así como ser siniestro pero en plan light, porque no escuchan música más oscura y, en general, parecen quedarse más en lo estético (aunque la mayor parte de los góticos también son así, pero eso ya es otra cuestión...).

Está de moda leer libros de vampiros, adorar a Tim Burton, tener toneladas de merchandising de Pesadilla Antes de Navidad y ponerse mucho lápiz de ojos negro. Y ahora nadie ve raro llevar el pelo teñido de colores extravagantes o llevar muchísimos piercings y tatuajes.

Ahora resulta que SM comienza a publicar novelas de Emily The Strange, y, no voy a negarlo, me parece maravilloso. Porque creo que ahora tal vez sí tenga alguna posibilidad de publicar con ellos. Porque, me guste o no, mis obras siempre tienen algo (mucho o poco..., normalmente mucho) de oscuro, y mis personajes casi siempre suelen ser un poquito tortuosos. Y que ahora todo eso esté de moda me abre puertas. Pero no puedo dejar, al mismo tiempo, de considerar todo esto absurdo.

Es como si, de algún modo, de un tiempo a esta parte se quisiese desmitificar todo lo oscuro a base de ponerlo de moda. Y no es que yo vaya de elitista o considere que mis gustos deben ser sólo míos. Pero creo que la tendencia a lo oscuro es algo que se debe llevar dentro, no se puede crear artificialmente. Además, en cuanto conviertes algo teóricamente extraño y transgresor en una gran maniobra de marketing, en un producto para el gran público, creo que pierde todo lo que pueda tener de extraño y transgresor. No sé si me explico. Emily The Strange es una chica rara, hosca, antipática, oscura, insociable. Me parece absurdo que un personaje de semejantes características haya de convertirse en un modelo a seguir para las niñas de doce años. Y no porque ser así esté mal. Sino porque tú eres así o no lo eres, pero no puedes forzarlo. Ahora un montón de niñas que jamás en su vida se han sentido atraídas por el mundo oscurillo comenzarán a devorar esas novelas y de golpe querrán vestir de negro y autoimponerse una actitud de estoy de vuelta de todo, estoy al margen, soy rara. ¡Pero no puedes ser rara cuando lo que haces es ceder a una maniora de marketing! ¿Cómo vas a estar al margen si haces lo mismo que trillones de niñas de tu edad, porque es lo que se lleva?

En fin, he mencionado a Emily como ejemplo, pero igual me servirían las tropecientas mil sagas de novelas de vampiros que salen de la nada como setas, o el modo en que las revistas de adolescentes de repente adoran a grupos como HIM, que en mis tiempos no hubiesen salido jamás en un póster central de ninguna revista.

Y lo que más me molesta de todo es que, para variar, todo parece quedarse en la superficie. No me molestaría que se pusiese de moda lo oscuro si al menos se ahondase más en el aspecto cultural. No se les recomienda a las niñas que lean a Lovecraft, o a Edgar Allan Poe, o a Bram Stoker, por citar a algunos clásicos de la literatura oscura. No se les recomienda que escuchen a grupos legendarios como The Cure (por nombrar, tal vez, al más conocido), ni que vean películas de Vincent Price, por ejemplo. No, se les recomienda que lean novelas de vampiros que son algo así como novelas románticas de toda la vida pero con un tipo con colmillos de por medio. Se les recomienda que escuchen a grupos como Green Day, que existen desde hace siglos y nunca han sido siniestros, pero ahora les ha dado por vestir de negro y llevar mucho lápiz de ojos. Se les recomienda, en definitiva, una actitud de falsa rebeldía, de tristeza autoimpuesta, de sentirse transgresor cuando lo único que hacen es seguir una moda.

No sé, no puedo evitar pensar que cada vez tendemos más a convertirlo todo en una moda, en algo impuesto. En algo que ya no sale de dentro, sino que se pone de moda o no, y se lleva durante una temporada para quedar luego enterrado en el olvido.

43 comentarios:

  1. No sé nada de esta novela de Emily, pero la estoy viendo en algunos blogs anunciándola. De todas maneras, SM viene apostando desde hace unos pocos años por esas historias. Hay una saga que me gusta mucho titulada: La Puerta oscura, y que para el año que viene saldra la tercera entrega. Algunos de sus protagonistas son góticos, y alguno de los ambientes son bastante siniestros. Me gusta mucho como narra David Lozano, que es el creador de esta saga. Y ahora también va a salir al mercado Bel: amor más allá de la muerte, de Care Santos. Sobre esta última novela he leído buenas críticas, y lo poco que he leído de esta autora me gusta. Así que si tienes novelas "raras" esta es la ocasión para aprovechar el momento.

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  2. Hola Violet,

    la verdad es que yo no conocía el personaje de Emily, y lo he hecho ahora al leer lo único que ha colgado SM en su web.

    Coincido en todo lo que dices. Además, como dije en mi post, no me gusta el personaje porque el modo en el que está planteado es una pose ya desde el principio. Y como tal, carece de fundamento, aparentemente no hay nada que lo sustente. La rebeldía es un factor esencial en la adolescencia, pero es una pena que se ponga como ejemplo una rebeldía lo que parece ser una rebeldía sistemática, arrogante y lamentablemente con una fuerte carga estética. Es un ejemplo de cómo convertirse en un estereotipo más, aunque del signo contrario a los estereotipos que Emily supuestamente detesta. Cuando ya se te cae el alma a los pies es cuando te das una vuelta por la página web y ves un poco el contenido, test de afinidad con Emily incluído.
    Y además, como dije, ni siquiera me parece que esté bien escrito...

    Saludos,

    María

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  3. Creo que en la adolescencia la necesidad de desmarcarse siempre está ahí, pero mal entendida en muchos casos,y por eso hay muchos chicos que se apuntan a estilos que en realidad son modas o tendencias que han impuesto a través del márketing. Tal vez sean conscientes en muchos casos (o no) de que en parte son duplicados, pero eso les garantiza varias cosas: la aceptación del grupo y el rechazo de los padres. Esto último, a según qué edades, también es algo que influye, dado que desean demostrar que ya no son niños y que pueden ir contra el mandato paterno, aunque sea convirtiéndose en un clon. Por eso la adolescencia es un buen caldo de cultivo para inculcar ciertos libros a través de la publicidad y de dar la imagen de ser lo que ellos buscan, pero, por otra parte, es probable que un libro que no goce de esta campaña publicitaria pase desapercibido entre la juventud porque "no mola" (aunque tal vez si lo leyeran les encantaría). Paradójicamente, muchos libros juveniles solo se disfrutan de adulto si no sale publicado en la coyuntura adecuada.

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  4. Anabel: No conocía esa saga de la que hablas, pero me la apunto para echarle un vistazo :) Lo del nuevo libro de Care Santos sí lo sabía, y, más allá de que todo esto esté de moda o no, me parece interesante.

    María: Has resumido bastante bien lo que quería decir, lo de la rebeldía sistemática. Me parece genial que los jóvenes sean rebeldes, de hecho creo que siempre debería ser así, porque es la edad de quejarse de todo, de protestar, de pensar que se puede cambiar el mundo. Pero todas esas cosas no pueden imponerse, que es lo que se pretende ahora. Además, ahora no se pretende cambiar nada ni rebelarse ante nada, tan sólo adoptar esa actitud.

    Ikima: Tienes razón, imagino que en mi caso me es más complicado situarme en lo que sucede ahora porque yo, cuando comencé a ser realmente rara en la adolescencia, no lo hacía ni para cabrear a mis padres, ni para ser aceptada. Nada más lejos, con mis padres nunca tuve problemas, y tardé siglos en encontrar amigos a los que les gustasen las mismas cosas que a mí. Pero claro, a mí todo eso me gustaba porque sí, porque yo era así, no porque se hubiese puesto de moda.

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  5. Es que antes las personas a las que les gustaban las cosas oscuras eran considerados bichos raros (no es que yo lo piense, es que era así), y el que lo era lo era de verdad, no por imposición. Creo que la juventud está perdiendo la verdadera rebeldía, lo que tú has dicho de creer que se puede cambiar el mundo. Es algo que me apena mucho, muchísimo. Yo siempre he sido una idealista incurable.

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  6. Querida Violet:

    Pienso que tienes razón pero creo que lo de tratar de imponer modas viene de muuuuy lejos. Te pongo el ejemplo de los años 80 cuando a todo el mundo le dió por escuchar a Hombres G( algo que me parece genial porque es de mis grupos preferidos)y vestir de una forma pija.Por lo menos en mi colegio era así; mis compañeros de clase "luchaban" entre ellos por ver quién llevaba el mejor pantalón, camisa, jersey y todo por una moda que venía impuesta de que el vaquero mejor era el Levis, el polo mejor era Lacoste...
    Como te digo ésto viene de lejos.
    Otra cosa es la literatura.Aquí si veo yo un desmadre a la hora de imponer lo que tenemos que leer.Es cierto que nos estamos acostumbrando a que nos digan qué tenemos que leer. De hecho puedes mirar a tu alrededor y verás a todos con la saga MIllenium, hace un par de años El código Da Vinci y tantos otros que no recuerdo y que son más puro marketing que una obra maravillosa.
    Con ésto quiero decir que tendremos que tener cuidado en lo que las editoriales quieren hacernos creer que es bueno para nosotros y nuestros hijos.Yo creo que SM está tirando por el lado equivocado porque siempre se ha caracterizado por ser una editorial que alientaba a luchar por unos valores y ahora parece tirar a lo fácil.

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  7. Ikima: Yo también soy una idealista incurable! Es que es lo que yo veo, se está acabando con la rebeldía auténtica a base de convertirlo todo en algo normal. Si puedes hacer creer a alguien que está siendo rebelde y transgresor haciendo exactamente lo que se le impone hacer, esa persona jamás luchará contra nada. No sé, es un tema complicado y que daría para mucho...

    Enrique: Tienes razón con lo de las modas. Pero tal vez me he expresado mal; las modas sí han existido siempre. De hecho, cuando yo tenía 13 ó 14 años todas las niñas de mi clase vestían igual y escuchaban a Take That o a los Backstreet Boys porque era lo que se llevaba. Pero yo me refería, y creo que eso es algo que no se había observado nunca hasta hace relativamente poco, a la moda hacia lo oscuro. Siempre se ha querido aborregar a la gente, pero ahora se la intenta aborregar a base de valores totalmente contrarios a dicho borreguismo. Se ha puesto de moda algo totalmente opuesto a las modas: el ser insociable, el estar triste, el ser siniestro. Es eso lo que me resulta absurdo, cómo algo que siempre se había considerado "negativo" ahora pasa a ser guay.

    Y tienes mucha razón con lo de imponernos qué leer. Ahora parece impensable para muchísima gente entrar en una librería, tirarse ahí un buen rato mirando y acabar comprando lo que le resulte interesante. Nos meten por los ojos los bestsellers de turno (que se convierten en bestsellers precisamente por sus brutales campañas de marketing), y eso es lo que lee todo el mundo, sin excepción.

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  8. Enrique, me leí el Código Da Vinci, y no me gustó, pero reconozco que está muy bien pensado. Con Millenium si que he llegado a engancharme, y sin ser una obra maestra, creo que está bien. A veces yo necesito ese tipo de literatura de marketing, como otras necesito novelas más profundas. Y SM, como cualquier editorial, es un negocio. No sé si es tirar de lo fácil, pero a mí me suele gustar lo que publican. Yo no sé si lo hacéis vosotros, pero yo suelo recomendar libros a mi hijo (tiene casi 14 años), y aunque me gustaría que leyera mucho más, sé que hay libros que no le gustan, y sabiendo de sus gustos personales acierto con sus lecturas. Una de las cosas que apuntó Ikima en el post anterior es estudiar lo que se publica, y eso es algo que llevo haciendo desde hace unos cuantos meses. Hay muchos blogs que se dedican a hacer reseñas, y siempre es interesante leer lo que opinan de los libros que se publican antes de ir a comprarlos.

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  9. En mi caso no suelo leer obras con un marketing agresivo, porque, salvo La Sombra del Viento, que sí que me gustó, todas las que he leído con estas características me han decepcionado mucho, muchísimo. El Código da Vinci fue una de las decepcionantes, y desde entonces, nunca más. No digo que en un momento dado no me lea alguna más, pero con el poco tiempo que tengo procuro leer obras que puedan aportarme algo, o que me ayuden a mejorar y a aprender técnicas que me impresionen. No quiero decir con ello que vaya de súper entendida y me pase el día leyendo grandes clásicos de la literatura ni mucho menos, pero sí que soy muy selectiva, sobretodo a la hora de hacer caso a una crítica. No es lo mismo una recomendación de alguien que sabes que tiene gustos similares a los tuyos que la recomendación de un periódico o revista que puede estar (o está, generalmente) influenciada por intereses comerciales. Entender los libros como un mero negocio ha ido, sin duda, en detrimento de la literatura. Una pena.

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  10. Acabo de pillar un libro que tenía mi hijo en la estantería, que se llama: "Edgar y Ellen, Bichos raros", y es una obra un poco macabra, pero contada de una manera divertida. Y es esta misma situación absurda que viven estos dos hermanos, la que nos hace plantear que las acciones de los protagonistas pueden ser divertidas, pero no están bien. Edgar y Ellen hacen lo que todo niño quisiera hacer porque no tienen padres que cuiden de ellos, y porque aún no calculan muy bien cuáles van a ser las consecuencias de sus acciones. Y creo que por eso mismo funciona la obra, porque los niños que la leen sacan sus propias conclusiones. Ellos son los que deciden realmente si lo que hacen Edgar y Ellen está bien.

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  11. Yo tampoco suelo leer obras con marketing agresivo. De hecho, suelo negarme en redondo a hacerlo, porque en cuanto los medios de comunicación me bombardean con algo (ya sea libro, película o lo que sea), le cojo manía. Imagino que alguna vez me perderé algo que valga la pena, pero no puedo evitarlo. En el caso de Millenium sí tengo curiosidad por leer los libros, pero porque vi la película y me gustó bastante.

    Anabel, no conozco el libro del que hablas pero parece interesante, sobretodo si, como dices, está planteada de modo que es el público el que tiene que plantearse si lo que hacen está bien o no. Me gusta que siempre se deje cierta duda en el aire, no que te metan por los ojos que algo es de una manera u otra por narices.

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  12. Acabo te terminar la novela esta tarde, y reconozco que me he divertido con ella. Edgar y Ellen son dos hermanos que nunca traman nada bueno, y el lector no se siente identificados con estos dos antihéroes, sino con los demás personajes. Hay algunos que realemnte son un poco estúpidos, pero puedo decir que está muy bien logrado. Se me olvidó comentar que la ha publicado SM.

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  13. Hola Violet,

    yo era muy reticente a leer Millenium por todo lo que comentas. Este verano ví la película y me gustó, y me he leído directamente el 2º libro. La verdad es que aunque le veo algunos defectos, creo que también tiene muchas virtudes y me ha gustado. En relación a lo que opiné sobre Emily the Strange, en el caso de Millenium creo la protagonista es un ejemplo de un personaje aparentemente "oscuro", pero se va cocido a fuego lento y sin demasiada prisa, el lector la va conociendo por sus actos y no por una declaración de intenciones en las 4 primeras páginas, tiene mucho más trasfondo de lo que se muestra en un principio y resulta tener bastante atractivo. Es cierto que es una novela para adultos, pero ese proceso se puede seguir igualmente en otras situaciones que sean más adecuadas para la edad del lector.

    Como veis, no me ha gustado nada la pobre Emily... ;)

    saludos a todos

    María

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  14. Hola, creo que comenté que me leí las dos primeras de Millenium, y he quedado enganchada con Lisbeth, porque es un personaje fascinante. Y no siendo una prosa muy elaborada, ya me gustaría escribir una novela donde hay una denuncia social, y en este caso Milenium la tiene, y que funcione tan bien. Creo que ese es uno de los aciertos de la historia, y otro acierto es la protagonista, que brilla por sí sola.

    Con respecto a Emily no conozco la historia, pero me está entrando el gusanillo, y saber qué es lo que les fascina a los adolescentes de esta novela. Igual es esa pose fingida lo que hace reflexionar al lector, e incomoda. Es otra manera de educar, y también es muy válida.

    De todas maneras SM no es la única editorial que hay que publica estas historias. Sea como sea, y lo vuelvo a repetir las veces que haga falta, últimamente quiero dar prioridad a la gente que publica en España. Se están haciendo cosas muy buenas, y no hay que olvidar que SM es una editorial que apuesta por autores nacionales. Por una parte tiene una colección con una serie de temas muy concretos, y por otra parte publica fantasía que está muy bien.
    Ikima lo dejó muy claro en el post anterior, hay que saber lo que publica una editorial, porque puedes tener una historia muy buena, pero no encaja dentro de sus planes. Y aunque nos joda, debemos saber que hay ciertas historias que no son publicables en algunas editoriales.

    Igual hay que darle a Emily la oportunidad que no le di a El Salvaje, pero una vez leída, he reconocido que es una gran novela. No podemos valorar una historia en los dos primeros capítulos. Yo por mi parte, no quiero cometer ese mismo error otra vez.

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  15. Es cierto que a las cosas hay que darles una oportunidad, pero estoy de acuerdo con María en que una declaración de intenciones y de la forma de ser del personaje en las primeras páginas no es muy adecuado, al menos a mí no me gusta demasiado. Es preferible mostrar al personaje lentamente, por sus hechos, por sus gestos y comportamientos... Cuando conocemos a alguien no viene y nos dice: "Hola, me llamo X, soy alegre, optimista, impulsivo y me encantan las reuniones sociales en las que soy el centro de atención y hablo constantemente sobre mí mismo mientras todos me escuchan". No lo dice, pero nos daremos cuenta de ello al irle conociendo por cómo se comporta.

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  16. Anabel, siento no estar de acuerdo contigo cuando dices que hay que darle una oportunidad a una novela aunque lo que hayas leído al principio no te guste. Yo pienso que una novela es como una película (de hecho muchas de ellas están basadas en novelas) y si te aburres al principio mal lo vas a pasar.Hay que saber enganchar desde el principio, no me vale, el ya llegará después de esta página y ya llegará depués de ésta y así sucesivamente.Quizás haya novelas que merezcan la pena aunque el principio sea un bodrio pero creo que son la minoría.Normalmente uno disfruta enormemente cuando en el primer capítulo ves algo que te engancha y te hace seguir porque hay algo que te llama la atención.Un ejemplo: "La sombra del viento" cuando te habla del cementerio de los libros olvidados en una Barcelona del siglo pasado.Eso es atrapar al lector.

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  17. He encontrado un foro que es muy entretenido e interesante.Se llama www.forodeliteratura.com

    Os lo recomiendo y a ver si nos vemos también por allí.

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  18. Hola Enrique, quizás uno de mis defectos es que siempre me termino los libros que empiezo, y también por eso haya leído de todo en esta vida. Sólo ha habido una vez que dejé un libro a medias, pero creo que no era mi momento. También decirte que cuando comencé a leer Cien años de soledad no pude pasar de la primera página, hasta que dos o tres años lo cogí de nuevo y me lo terminé en dos suspiros. Desde entonces me gusta mucho la narrativa de García Márquez. Con eso no quiero decir que un libro no te atrape desde la primera página. Hay libros que les he ido cogiendo el gusto después de leer más de cien páginas, y luego me han parecido una maravilla, y libros que me han atrapado desde el principio, y después me han decepcionado porque lo que venden es solo un escaparate. Pero como en todo, es cuestión de gustos. Creo que no soy muy difícil de contetar porque leo de todo.

    Quería aprovechar este espacio para deciros que tengo una novela infantil que me gustaría presentar al premio BdV de SM. Sé que está muyyyy difícil, que el nivel es altísimo. Pero como soy un poco cabezona, la mandaré a ver qué tal.

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  19. ¡Anabel! ¡Eres increíble! ¿En cuánto tiempo la has escrito? ¡Mucha suerte!

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  20. ¡Anabel, muchísima suerte! A ver si sale sganadora y puedo "presumir" de conocer a un escritor.
    Un abrazo

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  21. Muchas gracias por vuestros apoyos. Tenía una idea en la cabeza desde hace algún tiempo, y durante un mes, más o menos, la he ido rumiando, después hice un análisis de los capítulos y qué quería tratar en ellos, y en una semana y media la he terminado, a un ritmo de siete horas diarias. Pero son capítulos cortos y es para niños de ocho años.
    De todas maneras está muy difícil y no me voy a hacer ilusiones porque al concurso llegan obras de mucha calidad, y yo estoy ahora en una época que dudo de todo lo que escribo.
    Creo que Violet también presenta una novela, pero es para el premio GA. Si es así, le deseo mucha suerte.

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  22. Paso un día sin mirar el blog y qué de comentarios me encuentro!! Mucha suerte con tu novela, Anabel. Desde luego que la has escrito en un tiempo récord! Efectivamente yo me presento al Gran Angular. Tenía (bueno, tengo) otra idea para infantil y la idea inicial cuando empezó el año era tener listas las dos novelas, una para GA y otra para BdV, pero ya era demasiado, bastante he tenido con escribir una de 200 páginas en unos 3 meses. Pues eso, a ver si al menos, aunque no ganemos, conseguimos que nos publiquen! :)

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  23. Ahora estamos repasando la novela mi hijo y yo, y está partido de risa. Eso es un aliciente para mandarla, y eso que mi hijo tiene 13 años, pero hay algunas situaciones que le recuerdan a él y a sus primas pequeñas.

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  24. La mía todavía no la ha leído entera nadie de mi entorno cercano (andan todos faltos de tiempo!), pero lo que llevan leído les ha gustado, y sobretodo me alegro de que en el informe literario me hayan hecho críticas tan buenas. Ganar siempre será complicado, pero sólo por tener una opinión buena de alguien, digamos, entendido en el tema ya estoy feliz! :)

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  25. Violet, ¿qué tipos de cosas te han comentado en el informe? ¿Se aprende de cara a futuras obras con el informe o sólo te sirve para la obra que corrigen? Es que me estoy planteando hacer una corrección de mi novela actual (cuando la acabe) para aprender de ella y poder aplicar las reglas que me indiquen en el futuro, pero si sólo sirve para esa obra no estoy tan segura...

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  26. Sí que sirve para aprender en futuras obras, aunque obviamente depende también del género.

    En el caso del informe anterior que pedí, me dieron muchos consejos de cara a la literatura infantil, que ahora puedo aplicar en otras historias. En el más reciente, que es la novela que voy a presentar a GA, he notado la diferencia de cómo algunas cosas que me criticaban en la otra novela, aquí las han pasado por alto, pero porque el público es diferente y hay determinados modos de expresarse o de estructurar una historia que pueden ser muy válidos para un género pero no para otros. Desde mi punto de vista sí que ayuda en general, a mí me ha hecho darme cuenta de algunos fallos recurrentes que cometía en todas mis obras (como escribir frases demasiado largas, utilizar demasiados adverbios acabados en mente o no dejar clara la diferencia entre narrador y personaje, cuando escribo en primera persona), y a nivel gramatical siempre se comentan cosas a tener en cuenta en el futuro.

    Yo desde luego lo he visto como una gran inversión, y eso que estuve a punto de no pedir el último informe porque lo veía muy caro, pero ahora no me arrepiento.

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  27. Hola a todos,

    Anabel, Violet, muchísima suerte a las dos. Sería realmente estupendo que las ganadoras salieran de este blog...sois unas máquinas (lo siento, tengo que decirlo!) y espero que los esfuerzos, y estoy segura que el talento, serán reconocidos.

    Si alguno más se presenta, le deseo también mucha suerte.

    Saludos

    María

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  28. Pues a mí me está ocurriendo algo muy extraño (siento que no viene mucho a cuento, pero quería comentarlo) y es que con la novela que estoy ahora, que llevo unas 220 páginas, estoy ya llegando casi al desenlace, y me da una pena... una pena increíble acabarla, como cuando lees un libro que te gusta mucho y te apena leerte las últimas páginas... Me ocurre algo semejante. Espero que no se quede así para siempre... "La novela inacabada", la voy a llamar. Jeje.

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  29. Hola María, gracias, que creo que lo necesitamos, y mucho. Se presenta mucha gente a este concurso, y de mucho nivel. Con eso no quiero decir que la novela de Violet no tenga nivel, pero son tantas variables a la hora de evaluar una novela, que ya no sabes a qué atenerte.

    Ikima, a veces las historias acaban cuando acaban. Estoy escribiendo una novela juvenil a la que he tenido que restructurar capítulos y añadir otros. Cuando pensaba que me quedaban cinco para terminanrla, me di cuenta que eran algunos más. A mí también me da pena acabar las historias, y en esta infantil que acabo de escribir me hubiera gustado añadir alguna cosa más, pero por espacio, y sabiendo al público que va dirigida no he podido extenderme mucho más. Venga acábala ya, y eso también va por mí, que llevo con esta historia desde principios de año. El día que la acabe os lo diré.

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  30. Yo ahora tengo tan poquito tiempo que escribo a un ritmo de tortuga... algunos día escribo una página, otros dos, muchos ninguna... pero me tiene bastante absorbida y pienso constantemente en los personajes, ¡como si existieran! Tengo el problema añadido de que necesito documentarme sobre algunos asuntos musicales para que todo me cuadre perfectamente, por lo que también me limita el tiempo. Pero la acabaré poco a poco y me pondré a corregirla con ahínco. El otro día me compré un libro que se llama "Escribir y reescribir: un manual para la corrección de textos" (no estoy segura de que éste sea el título exacto, no lo tengo delante) y parece de gran utilidad.

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  31. Hola Ikima,

    a mí me pasa lo que dices, no consigo sacar tiempo y empiezo a agobiarme. He conseguido llegar a la página 99 de la mía después de varios meses de trabajo, pero estimo que será una novela de unas 300 páginas, así que tal vez la consiga terminar en un par de años... :)
    También debe estar muy documentada, lo cual me quita mucho tiempo, y además soy un poco obsesiva y compruebo cada detalle, y aunque muchas veces pienso que no todo es tan importante, necesito verificarlo.
    Cuando veo que escribís a la velocidad que lo hacéis, la verdad es que me entran las prisas, pero no consigo arañar más tiempo y últimamente estoy un poco agotada así que por las noches tampoco funciono.
    Ikima, me interesa el libro que mencionas, pero si puedes, por favor en algún momento pon los datos completos para buscarlo.
    Por cierto, los pocos detalles que dais sobre vuestras novelas han conseguido intrigarme. Ójala las veamos publicadas para poder leerlas.
    Saludos a todos,
    María

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  32. Ikima, yo también sufro cuando voy llegando al final de una novela! De hecho, en cuanto termino una historia me viene una especie de bajón, por un lado porque me quedo sin la actividad principal que he estado realizando durante los últimos tiempos, que es precisamente escribirla, y por otro porque me gustaría poder continuar dándole vida a los personajes por tiempo indefinido. Pero toda historia tiene su principio y su final, y cuando llega al final, no conviene alargarlo más de la cuenta. Y yo también pienso constantemente en mis personajes! Voy haciendo mi día a día normal, pero es como si lo viese todo desde los ojos de los personajes que voy creando, sintiendo lo que ellos sentirían, escuchando la música que ellos escucharían, incluso adoptando a veces (casi sin darme cuenta) cierto comportamiento más propio de ellos que de mí. En eso soy bastante obsesiva, es como si me viese poseída por otras personalidades.

    Suena interesante lo del libro que te has comprado, ya nos concretarás más datos y qué te parece.

    Muchas gracias por los ánimos, María :) A mí ahora me queda darle el último repaso a mi novela antes de encargar las impresiones y encuadernaciones para enviar ya a concurso, que no quiero dejarlo casi para el último día como hice el año pasado! Que por cierto, cómo odio eso de tener que enviar las obras en papel, qué poco ecológico!!

    Saludos!

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  33. Violet, ¿cómo es que encargas las impresiones y encuadernaciones? Yo sólo las fotocopio y les pongo un gusanillo. ¿Tú no lo haces así?

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  34. Suelo enviar por email el archivo a una imprenta cercana y ellos me imprimen las copias y le ponen el gusanillo. Antes imprimía en casa, pero mi impresora es lentísima, y siempre acababa fallando la tinta a mitad, así que al final dejo que lo hagan todo desde la imprenta, así me despreocupo de todo y luego voy a recogerlo cuando está terminado y ya está :)

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  35. Violet, con respecto a lo que comentas que te ocurre a ti también con tus personajes: en una entrevista, William Faulkner afirma que “el artista es responsable sólo ante su obra. Será completamente despiadado si es un buen artista. Tiene un sueño, y ese sueño lo angustia tanto que debe librarse de él. Hasta entonces no tiene paz. Lo echa todo por la borda: el honor, el orgullo, la decencia, la seguridad, la felicidad, todo, con tal de escribir el libro. Si un artista tiene que robarle a su madre, no vacilará en hacerlo...”. Evidentemente me parece tan extremista como irreal (lo cierto es que no me creo que él se crea sus propias palabras, ni que le robara a su madre en caso necesario) pero de forma alegórica supongo que es eso: una obsesión. En cierta manera, el escritor, y el artista en general, siempre es algo obsesivo. De modo que no creo que eso de pensar a través de los personajes o de vivir a través de ellos sea algo negativo, sino más bien lo adecuado para la obra, independientemente de que sea adecuado o no para la “vida real”. Sin duda es difícil que otras personas que no sienten esta misma ansiedad lo comprendan y aun que lo justifiquen.

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  36. Sí que es un poco exagerado! Pero es cierto, para el artista la obra siempre se suele convertir en algo obsesivo y es muy complicado que alguien que no escribe (o pinta, o lo que sea) lo entienda. Por eso me gusta comentar este tipo de cosas aquí ;)

    Precisamente hace siglos (pues cuando tenía 15 años o así) empecé a escribir una novelilla sobre un escritor que está escribiendo a su vez sobre un asesino en serie, y se obsesiona tanto con el personaje que al final él mismo se convierte en psicópata... La releí hace poco y me tiré de los pelos, porque la idea me sigue gustando pero las formas eran lo peor! Igual algún día retomo algo así, pero tal vez para un relato corto...

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  37. Por cierto, en cuanto al libro que comenté se llama "Escribir y reescribir. Un manual para la corrección de textos narrativos" de Gloria Fernández Rozas. Está editado por Fuentetaja, donde me he comprado gran cantidad de libros relacionados con la práctica de la literatura, como "La construcción del personaje literario", "El arte de la ficción", "Cómo documentar tu novela", "Curso de teoría y práctica del relato" (16 volúmenes)... en fin, muchos libros que pueden resultar útiles y que yo suelo releer con frecuencia. Me compré uno por probar y me gustó, me pareció realmente elaborado de forma profesional y por profesionales, así que suelo adquirir alguno de tanto en cuando.

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  38. Muchas gracias Ikima, lo buscaré.

    Por cierto, Violet. La idea de tu novela era buena, y estoy de acuerdo que es bastante apropiada para un relato corto.

    Voy a ver si saco fuerzas y consigo escribir algo.

    saludos a todos

    María

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  39. Hablando de cosas oscuras... ¡Nos acercamos peligrosamente a las 666 visitas! Uhhhh, ¿será el día de hoy el Apocalipsis de este blog?

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  40. Yo soy la visitante 666... eso me recuerda a un manga que estamos leyendo mi hijo y yo, y lleva este título.

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  41. Hmm... Al final no pasó nada por el 666, si exceptuamos que aquí estuvo diluviando como si se fuese a acabar el mundo! Anabel, de qué va el manga que se llama así? Yo no soy muy aficionada al manga, pero mi novio sí y ahora me estoy leyendo Dragon Head, que son 10 tomos. Voy por el 4º y está genial, es de terror apocalíptico y la verdad es que lo estoy pasando mal!

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  42. Violet, el manga del que te hablo acaba de empezar a editarse en España. El protagonista es un chaval marginado por la sociedad porque, al parecer, tiene unos extraños poderes que mata a las personas que le rodean. Un día se encuentra con una chica buscadora de O-parts, que son unos objetos mágicos de una civilización antigua, que sólo ciertas personas saben controlar. Entre ambos surge una amistad, más por necesidad que por otra cosa. Y a partir de aquí, La chica va descubriendo quien es este chico, que ni él mismo sabe muy bien qué lleva dentro Satán. La historia está contada con humor, y de momento no me parece que dé mucho miedo.

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